Cruceiros de Muros(II)

Textos: Don Ramón de Artaza Malvarez
Fotografía: José Manuel Formoso Luces
Picture4EL DEL CEMENTERIO:  Su columna es octogonal. En la parte que forma el capitel tiene cuatro calderos en los cuatro frentes, signo o emblema del apellido Calderón. La cruz está escavada hasta la mitad de su espesor en todas sus caras; bellamente labrada, termina en sus extremos por delicados rosetones o florones. En uno de sus frentes presenta la imagen del Redentor, en el hueco en alto relieve, y en el otro una Virgen sobre una mensulita con las manos cruzadas y en cada brazo de la Cruz una cabeza de ángel con dos alas. El fuste es de igual espesor que la cruz. En el hueco de la parte superior del brazo de la cruz hay un jarrón con flores. Este crucero debió haber formado parte, dada su antigüedad, del atrio-cementerio de la iglesia parroquial de San Pedro y puede que se alzase sobre una sepultura, pero pudo ser también la Cruz que suele ponerse en los centros de los cementerios y siendo el atrio de la citada iglesia cementerio, acaso como tal atrio y frente a ella fuese colocado. El que repetido en los cuatro lados del capitel aparece, sería de la familia Calderón a la que pertenece este signo y se alzaría en el centro de sus sepulturas, pues carece de fundamento el suponer que fueran esculpidos estos emblemas nobiliarios por mero capricho sin responder a un fin determinado y más en aquella época en que los signos heráldicos o representativos tenían tanta importancia como uso.

Picture6EL DE LA PLAZA DEL CRISTO:  llamada también de San Rosa. Ocupa el centro de la plazuela de su nombre. Es de gran altura y se asienta sobre un bloque labrado y éste sobre tres filas de escaleras formando cuadrados. El fuste es de una pieza, es octogonal. El capitel donde se asienta la Cruz, que es cilíndrica con nudos o espinas, tiene cuatro cabezas de ángeles en sus lados y en los ángulos, frentes y demás contornos, hermosos adornos y follajes. Por un lado está la imagen del Redentor y por la otra la Virgen de los Dolores, sobre una mensulita, que descansa sobre la cabeza de un ángel, ambas imágenes tendrán cerca de un metro de alto.
Antes de la colocación del Crucifijo llamose esta plazoleta, de la leña, y desde su colocación ostenta la actual denominación. Alzose el 15 de diciembre de 1789. Lo mandó hacer Antonio de la Cruz y su mujer Melchora Sánchez, teniendo en su compañía a su yerno José Duque. Un canto Popular nos recuerda su situación al decir:

O santo Cristo d´a plaza
vai na nosa compañía.
A Virxe d´a Soledá
queda n´a porta da Vila.

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